Opinión | La bodeguilla

Ni Lampedusa explicaría lo del PSOE en Fuengirola

Fue la primera ciudad malagueña con gestora socialista tras el 28M, y nueve meses después vuelve la misma secretaria general 

Dani Pérez y Carmen Segura, en una imagen de archivo de una visita del secretario general a Fuengirola.

Dani Pérez y Carmen Segura, en una imagen de archivo de una visita del secretario general a Fuengirola. / PSOE de Málaga

La tertulia política de La Bodeguilla llevaba unos días desmenuzando las distintas guerras internas con las que el socialismo malagueño ha empezado el verano, en aquellas agrupaciones a las que se les ha ido levantando las gestoras. Y al llegar a la última de ellas, la que queda más cercana en el tiempo, ‘El tabernero’ echa especialmente de menos sobre su barra imaginaria a ‘El Italiano’. Hace días que no se le ve el pelo por allí, desde que empezó la Eurocopa para ser exactos, al exponente italo-cartameño del sanedrín. Ya le hubiera gustado a ‘El tabernero’ haberle preguntado qué hubiera pensado, sobre lo que ha pasado con el PSOE en Fuengirola, su ilustre compatriota Giuseppe Tomasi di Lampedusa (1896-1957). Aquel que escribió ‘El gatopardo’ y le regaló a la posteridad una frase como esta: «Si queremos que todo siga como está, es necesario que todo cambie». De hecho, ‘El tabernero’ echa mano de la cita y, enseguida, se percata de que ni con ese manojillo de palabras lo explicaría. Igual algún día quien regresa es el añorado ‘Capitán’ y él sí trae claves frescas del terreno.

Precisamente, Fuengirola fue la primera de las principales ciudades malagueñas -medio año después le tocó a Torremolinos y Vélez-Málaga- en cuya agrupación el PSOE de Málaga estableció una gestora, que la ha gestionado hasta ahora acumulando tres trimestres. En octubre de 2023, la ejecutiva de Carmen Segura fue liquidada por haberse negado a debatir una moción de censura presentada por el 40% de la militancia, que puso la lupa sobre ciertas decisiones y la culpó de los malos resultados electorales . Sin ir más lejos, en las pasadas elecciones municipales Segura encabezó la candidatura que dejó a los socialistas en el Ayuntamiento de Fuengirola con cinco ediles de 25. Su lista fracasó al perder un representante, y no erosionó la mayoría absoluta del Partido Popular, que mantuvo sus 15 ediles.

Pese al ‘castigo’, Segura y sus afines han reivindicado durante estos últimos meses el fin de la gestora y la convocatoria de una asamblea como en la que ella ganó el viernes, con una escasa participación de poco más de un tercio de la militancia. Regresaba así al liderazgo y lo hizo bajo las protestas del sector crítico, que incluso retiró antes de someterla a votación una lista alternativa encabezada por la exconcejala Elena Álvarez. En la intervención, cargaron contra la dirección provincial y proclamaron que no participarían en una «parodia de la democracia interna». Incluso, han impugnado la convocatoria de esta asamblea.

La batalla de los críticos

La ‘lista protesta’ de los críticos, con su consiguiente éxodo aparentemente espontáneo, no resultó del todo una sorpresa si se atiende a las acusaciones que llegaron a verter en las horas previas a la asamblea, para canalizar un descontento que fue creciendo a medida que veían que «la gestora no iba a servir para absolutamente nada».

El exsecretario general del PSOE de Fuengirola Antonio Contreras Millán -que había firmado un par de semanas antes el manifiesto de 70 veteranos socialistas malagueños contra la dirección provincial de Dani Pérez - relató el malestar existente en una ‘carta al director’ publicada por La Opinión de Málaga. Lo hizo en vísperas de la reunión de la militancia en la que se materializaría, durante la tarde-noche del pasado viernes, el teórico proceso de renovación llevado a cabo estos últimos meses.

Así, tras la designación de la gestora en octubre del año pasado, un grupo de militantes remitió para que los conociera la dirección provincial «innumerables escritos relatando los incumplimientos estatutarios de la anterior Comisión Ejecutiva Municipal, así como del Grupo Municipal socialista», que también tiene al frente como portavoz en el Ayuntamiento de Fuengirola a Carmen Segura.

Al enumerar las denuncias formuladas, los críticos citaron entre otras «la suplantación de la secretaria de Organización por otro militante sin que se hubiese informado a la agrupación, incumpliendo las normas del partido»; o «la afiliación masiva que se había producido, mayoritariamente con familiares de concejales». En el fragor de la batalla planteada por los críticos del socialismo fuengiroleño, se ha llegado a asegurar que tanto el secretario general como el de Organización de la Ejecutiva Provincial, Dani Pérez y Pepe Bernal, «amparaban con su silencio las acciones denunciadas».