Los vecinos de Lagunillas hacen campaña contra los pisos turísticos

La Asociación de Vecinos Lagunillas Centro lleva una semana repartiendo a turistas y visitantes folletos en español, alemán e inglés contra el alquiler de pisos turísticos en el barrio, con el lema ‘No a los pisos turísticos. Si alquilas un piso turístico contribuyes a mi pobreza’.

El presidente vecinal Curro López explicó que la asociación ha decidido «hacer algo» ante el alto número de avisos de cese de alquileres de larga temporada en el barrio para dar paso a viviendas de uso turístico. «Los caseros quieren que los vecinos se vayan ya, todos viven en el barrio y hay muchas personas mayores», alertó.

Curro López manifestó que la llegada masiva de pisos de usos turístico a Lagunillas, «de los que un 30 o un 40 por ciento son ilegales», advirtió, se está traduciendo en la «destrucción de empleo», por el cierre de comercios cuyos locales también se dedican a este tipo de alquileres «y eso el Ayuntamiento y la Junta lo saben, porque no se están convirtiendo en alquileres de larga duración sino que todo se está haciendo para el turismo», criticó, al tiempo que subrayó que «hay locales del IMV que ya son pisos de uso turístico».

El presidente de la asociación de vecinos aclaró que los propietarios de viviendas pueden ganarse la vida como quieran pero el resultado no puede ser dejar la ciudad de Málaga «sin una solución habitacional para sus vecinos».

«Nos están echando de Málaga pero el problema es que tampoco hay sitio ya en los pueblos de alrededor: en Colmenar, en Coín, en Alhaurín de la Torre ya no hay alquileres y en el Centro de Málaga se está pagando el dormir en una cama por 400 euros», criticó.

Curro López reiteró esa cifra de entre un 30 y un 40 por ciento de pisos turísticos ilegales que, calcula, cree que existe en Lagunillas y denunció la falta de inspecciones para revertir la situación.

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Para el responsable vecinal es necesario frenar de una vez los pisos de uso turístico y apostar por la construcción de más hoteles «para que venga un turismo de calidad» y remarcó que, por su experiencia, al vivir en el barrio rodeado de este tipo de pisos sólo traen «turismo barato y de borrachera y no es que lo piense, es que lo vivo», recalcó.

En su caso, indicó, también ha recibido el aviso de su casero de que deberá dejar su vivienda en alquiler a final de año, «después de 14 años viviendo en ella y sin haber dejado de pagar ni un solo día». Curro López reconoció que no sabe adónde irá, «porque en Málaga no hay nada» y tampoco en su entorno.

Encarecimiento de los alquileres

Además, el presidente de la asociación de vecinos aprovechó para recordar que en la capital el esfuerzo económico para pagar el alquiler es mucho mayor de lo que indican las estadísticas: «En la asociación tenemos familias derivadas por los Servicios Sociales que están cobrando 1.300 o 1.400 euros y pagan de alquiler 1.200 o 1.300 euros o sea que lo que ganan es para pagar el alquiler; eso no es bienestar sino esclavitud».

Curro López informó además de que este martes tenía previsto reunirse con la concejala de Urbanismo, Carmen Casero, para trasladarle el malestar. Lo hará un día después de que el Ayuntamiento haya anunciado la prohibición temporal de nuevas viviendas turísticas, hasta la aprobación de una ordenanza que regule su distribución por zonas.

Para el presidente vecinal, las medidas que se vayan a tomar llegan «demasiado tarde». Hace un año, diez colectivos, entre ellos la asociación vecinal de Lagunillas, ya recogieron firmas para impedir más pisos de uso turístico.

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