Benalmádena

Desahucio en Benalmádena: «Estoy desesperado, no sé qué vamos a hacer»

Junto con su madre serán desahuciados de su vivienda en Benalmádena este miércoles, si nada lo remedia a última hora

Guity Ghazviniloo en la cocina de su casa de alquiler.

Guity Ghazviniloo en la cocina de su casa de alquiler. / L. O.

Si nada lo remedia a última hora, una comisión judicial ejecutará hoy miércoles, 26 de junio, el lanzamiento y posesión del piso donde viven Cyrus Ghazviniloo, un marbellí de 40 años, y su madre Guity, de 64, de origen iraní. Se trata de una vivienda de alquiler situada en el número 9 de las calles Las Flores, en Arroyo de la Miel (Benalmádena). En ella vive desde hace 20 años Cyrus Ghaznaviloo, que refiere una discapacidad del 35% por problemas de salud mental, y su madre Guity, que refiere una discapacidad del 41% también por problemas mentales, lo que hacen a esta familia especialmente vulnerable.

La vivienda cuenta con tres dormitorios, baño, salón-comedor, cocina, lavadero y una terraza, por la que pagan 550 € al mes. La propietaria la reclama para una hija suya que no puede hacer frente a la subida del precio del alquiler del piso donde vive con su nieta.

Durante estos años, la familia Ghazviniloo ha acumulado una deuda de 8.750 € por impago de alquiler. Cyrus también reconoce otra deuda de 6.000 € con Endesa («aunque si pago 400 € antes de final de mes no me cortan la luz», afirma) y de 300 € con el Ayuntamiento de Benalmádena (por no poder justificar una ayuda recibida para la compra de alimentos). Incluso tiene que devolver a la Seguridad Social unos 1.700 euros recibidos por el Ingreso Mínimo Vital.

Cyrus y Guity Ghazviniloo, en el piso de Arroyo de la Miel. | L.O.

Cyrus y Guity Ghazviniloo, en el piso de Arroyo de la Miel. / L. O.

Cyrus ha logrado un contrato fijo como barrendero los fines de semana y festivos en Mijas, por el que cobra 790 € al mes. Su madre cobra otra ayuda más exigua. Los escasos ingresos y la elevada deuda les dificultan acceder a otra vivienda en alquiler.

En toda la provincia de Málaga solo hay un albergue con 96 plazas para personas sin hogar. Y está en la capital, donde viven 200 sin techo. En la provincia no hay recursos para las personas sin hogar. «No sé qué vamos a hacer. Estoy desesperado», afirma Cyrus.