Cuenta atrás para la nueva FP Dual en Málaga

Formación entre el aula y la empresa en su máxima expresión. El curso próximo, todos los ciclos de la FP pública en Andalucía se impartirán en la llamada modalidad Dual. El concepto de prácticas en las empresas desaparece. Los alumnos participarán en el proceso productivo y aprenderán en un entorno real de trabajo. Todo un reto a nivel organizativo en un proceso del que aún no se saben todos los detalles pero sí las principales claves.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que no se parte de cero. La FP Dual empezó a implantarse hace una década, al principio de forma lenta. En Málaga, ha cogido impulso y en los últimos cinco años se ha pasado de 55 ciclos en Dual a 174.

Las plazas han aumentado un 155% desde 2018, pasando de 641 a 3.272 en el curso 2023-24. Igualmente, las empresas participantes han crecido desde las 355 de hace cinco años a las 2.259 actuales.

No obstante, el reto para el curso próximo es grande. Como anunció la consejera de Desarrollo Educativo y FP, Patricia del Pozo, en Málaga habrá 20.447 plazas de nuevo ingreso, lo que supone la creación de 4.520 nuevas en seis años. Y todas estarán en Dual.

En el curso que empezará en septiembre tendrán que convivir aún el modelo antiguo y el nuevo. Los que estarán en la modalidad Dual serán todos los alumnos de primero, pero los de segundo curso que no tuvieran proyectos duales continuarán igual.

Formación compartida

«El nuevo modelo comparte la formación entre centro y empresa. Lo que se intenta es que el alumno conozca un entorno real de trabajo. En las empresas se van a encontrar unas instalaciones y recursos que en la mayoría de los centros no hay», subraya Isabel Muñoz, coordinadora pedagógica de FP Dual de la Delegación en Málaga.

A diferencia de en las prácticas, en la Dual la formación es así compartida. El alumnado tiene un plan de formación individualizado, diseñado con el consenso de la empresa, y un tutor laboral.

También aumenta el tiempo en la empresa. La FP Dual se ha organizado en dos modalidades: la General y la Intensiva. En la primera, la formación en la empresa tendrá una duración de entre el 25% y el 35% del total del currículum, mientras que en la Intensiva se podrá pasar hasta la mitad del tiempo en la empresa (entre el 35% y el 50%).

A falta de instrucciones en Andalucía, quienes se matriculen este curso en FP encontrarán una modalidad más denominada General con puestos en intensivo. Una categoría intermedia que se ha establecido para los ciclos que ya estaban en Dual el curso pasado. El tiempo que finalmente pasarán estos alumnos en el entorno laboral dependerá de las empresas con las que se cuente, ya que la modalidad intensiva puede implicar hasta 1.000 horas en la empresa y eso supone una gran implicación por parte de la misma.

Por su parte, los ciclos que se estrenan con la Dual comenzarán en la modalidad General. Para éstos, que son la gran mayoría, el cambio es importante aunque tuvieran ya contacto con empresas a través de la llamada Formación en Centros de Trabajo (FCT), que se realizaba en el último trimestre del curso.

¿Cuándo se realizará la formación ahora en la empresa? Aunque aún no hay plazos cerrados, Isabel Muñoz apunta que será a partir del segundo trimestre, cuando los alumnos hayan recibido una formación inicial, que además de los contenidos del currículum incluye prevención de riesgos laborales.

Conectar con las empresas

Otra de las grandes claves de esta nueva FP es conectar con empresas para este volumen de alumnado, que además no deja de crecer cada curso. Juan Carlos Amaya, coordinador de dinamizadores de FP Dual en Málaga, explica que ya han hablado con organizaciones como la Confederación de Empresarios o la Cámara de Comercio y «hay ganas de colaborar, tienen mucha disposición de trasladar el mensaje de esta necesidad a sus asociados».

La red de dinamizadores se está encargando de contactar con los centros educativos que no tienen experiencia en Dual -en Málaga, actualmente, sólo 55 la tienen- para explicarles los detalles de esta nueva formación.

Aunque Juan Carlos Amaya, también profesor de FP en el CPIFP Alan Turing, destaca que ningún centro parte de cero porque tienen experiencia con empresas a través de las prácticas clásicas: «Se trata de reconvertirlo a la Dual».

Hay que concienciar al empresariado de que su implicación tiene que ser mayor en este nuevo modelo, pero «a cambio están formando a su futura cantera. Mientras más se impliquen en su formación, mejor preparados estarán estos trabajadores», apunta Isabel Muñoz.

Alta en la Seguridad Social

Añade un aspecto fundamental: todos los alumnos serán dados de alta en la Seguridad Social sin coste para la empresa. En cuanto a la remuneración para el alumnado, a partir de 2028 la nueva ley de FP contempla un contrato de formación, pero por ahora se pueden mantener las becas en el régimen intensivo.

Ambos responsables de FP destacan que en Málaga el ambiente entre las empresas es muy favorable a esta modalidad educativa y apuntan que más del 90% de las empresas que han empezado en la Dual, repiten y son ya colaboradoras fijas. Por ello, animan a todos los sectores productivos de la provincia y al profesorado a conocer este nuevo modelo de FP Dual.

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