Entrevista | José García CEO de ANOVO

"Anovo va a regresar a su edificio original del PTA; crecemos y hay grandes planes de futuro"

Anovo supera los 1.400 empleados en España, de los que 740 están en su centro del Málaga TechPark, y aspira a alcanzar los 100 millones de facturación y a expandir su trabajo a nivel internacional

Este año se mudará al gran edificio a la entrada del parque, que fue suyo hasta 2005 y que ha reformado ahora el Grupo Aristeas

José García, CEO de ANOVO, hace unos días en la calle Larios de Málaga.

José García, CEO de ANOVO, hace unos días en la calle Larios de Málaga. / Alex Zea

José Vicente Rodríguez

José Vicente Rodríguez

Anovo está especializada en servicios de reparación de dispositivos para los grandes operadores y fabricantes. Supera los 1.400 empleados en España, de los que 740 están en su centro matriz del Málaga Tech Park (PTA). Anovo aspira a alcanzar los 100 millones de facturación en breve y a expandir su trabajo a nivel internacional. Este año, además, cambian de sede dentro del PTA ¿Su destino? La gran planta a la entrada de la tecnópolis que en su día fue suya y que tuvieron que vender hace ahora19 años.

-Anovo, especializada actualmente en servicios de reparación de dispositivos para grandes operadores y fabricantes, remonta su historia en Málaga a los tiempos de la antigua Alcatel. 

-Anovo era una compañía fundada en Francia que empezó a comprar fábricas en distintos países. En España adquirió empresas en Barcelona, Madrid, Valencia y Málaga. La de Málaga fue la fábrica de Alcatel Citesa, que desde 1995 estaba ya en el Parque Tecnológico de Andalucía (PTA). En el año 2000 Anovo compró el negocio y la planta, el acuerdo se escrituró a inicios de 2001. Llevamos así casi 24 años en Málaga, aunque por cuestiones de la pandemia los 20 años los tuvimos que celebrar en 2022, con algo de retraso (ríe).

-Anovo tiene entre sus señas de identidad el haberse reinventado en varias ocasiones. 

-Pues sí, de dedicarnos exclusivamente a la fabricación de cabinas de teléfonos para Alcatel y Telefónica o de teléfonos fijos como los que tenían nuestros padres (el Forma, el Domo,...) pasamos a reparar teléfonos móviles, luego ya routers, decodificadores, videoconsolas, ordenadores portátiles, ahora patinetes, freidoras de aire caliente,  inversores de energía solar, etc.

-La compañía ha apostado por la economía circular y la sostenibilidad, conceptos muy en boga. 

-Hemos tenido que ir innovando. Nuestro core business ahora es alargar el ciclo de vida del producto tecnológico en un amplio rango de servicios que comprenden no sólo la reparación, que fue el nuevo inicio de Anovo, sino la renovación, revalorización, reacondicionado, reciclaje y rediseño. Estamos elaborando un mapa de negocio con todas estas ‘R’, por decirlo de alguna manera. Podemos así desde reparar un artículo que podría desecharse para darle más vida hasta compartir información con el fabricante para rediseñar el producto, mejorando peculiaridades o características como la memoria de almacenamiento o el microprocesador para hacer más eficiente el producto.

-¿Cuántos dispositivos pasan al año por la fábrica de Anovo?

-En torno a cinco millones y medio es la cifra que manipulando actualmente.

MLG 25-06-2024.-José García, CEO de ANOVO.

José García, máximo responsable de la empresa ANOVO, con sede en el PTA de Málaga. / Alex Zea

-¿La mayoría son móviles o hay también otro tipo de aparatos? 

-Esa ha sido otra de las reinvenciones. Los móviles eran antes el 80-85% de nuestro volumen y ahora puede estar en el 30% o 35%. Lo que más está pasando ahora mismo por Anovo, en volumen de aparatos, son los routers y decodificadores, o sea, lo que hace que nos conectemos a internet y ver la televisión, y en segundo lugar están los móviles. Después tenemos las freidoras de aire caliente, robots aspiradores de suelo o de cocina, además de videoconsolas.

-¿Y de dónde llegan?

-Fundamentalmente de España y de Portugal, pero también somos centro de reacondicionamiento para algunos fabricantes como Nintendo, del que recibimos lotes desde Francia o Alemania. Otro servicio internacional que ofrecemos es el de soporte técnico o customer care para los clientes de Nintendo de toda Europa en siete idiomas.

-¿Quiénes son sus principales clientes?

-Trabajamos con los operadores de telecomunicaciones, Vodafone, Masorange o Telefónica, y también con fabricantes: Nintendo, HP, Apple (somos centro oficial de reparación de iPhone), Samsung o Xiaomi. Reparamos tanto en Málaga como en Madrid. Las grandes marcas no son dadas a dar acreditaciones en muchos sitios. Por ejemplo, Apple se hace en Madrid pero Huawei se hace solo en Málaga. Y otras se reparan en los dos sitios. Xiaomi, por ejemplo, es un fabricante muy importante para nosotros porque le hacemos todo el ecosistema: batidoras, pulseras inteligentes, patinetes, aspiradores... A Amazon, también le gestionamos devoluciones de tecnología en España. Empezamos con los móviles, pero luego nos metieron los robots del suelo, la televisión.... vamos creciendo con ellos en ramas de producto. Algunas se hacen en Madrid, y otras, como Philips, HP o Nintendo en Málaga. Eso nos sirve para no repetir inversiones en maquinaria de reparación.

-Hace un par de años eran 1.400 empleados en España, de los que 700 estaban en su actual sede en el PTA de Málaga. Y creo que la idea era acercarse a 1.000 personas en Málaga a medio plazo. 

-Hemos crecido, pero no como para cumplir todavía esa previsión. Andaremos ahora por 740 personas en el PTA. En Málaga hemos conseguido hace poco un contrato muy importante con el fabricante español Cecotec para cubrir la postventa de todos sus productos, con los que tenemos entre 80 o 90 personas trabajando casi en exclusividad para ellos. Pero es cierto que el mercado de routers y decodificadores, toda la parte de fibra, se ha enfriado un poco porque la gente no se cambia tanto de operadora. En todo caso, nuestra idea es siempre seguir creciendo. Anovo tiene grandes planes de futuro y la meta de llegar a 1.000 personas en Málaga sigue ahí. 

-¿Qué perfiles son los que trabajan en Anovo?

-De FP sobre todo. Son perfiles técnicos básicos o medios. Eso quiere decir FP1 o FP2 (grado medio o grado superior): técnicos, informáticos, telecomunicaciones, electrónica y algunas veces, especialistas manipuladores con gran actitud. Hay algunas tareas muy repetitivas que, para alguien de FP con vocación electrónica, pueden al final ser un poco mecánicas y aburridas así que esas tareas las hemos automatizado y robotizado, que es una de las cosas por las que tampoco hemos podido conseguir aún la cifra de empleados que teníamos en mente. 

-Encaran también un cambio de sede dentro del propio PTA, ¿cuál va ser el nuevo emplazamiento de Anovo?

-Va a ser justo la planta que era de nuestra propiedad y que tuvimos que vender en su día al PTA, en un momento de crisis. Ese edificio lo compró en su día Vitelcom para la fabricación de teléfonos móviles y luego, cuando quebró, ha estado muchos años cerrado. Está situado justo a la entrada del PTA, a la derecha, en la avenida Juan López Peñalver. El edificio lo adquirió en 2020 el grupo inversor inmobiliario Aristeas y hemos llegado a un acuerdo de alquiler con ellos. La reforma externa estructural de la nave ya está lista y lo que estamos haciendo ahora es la reforma interna para adaptarla tanto a laboratorio como almacén. Tiene 15.000 metros cuadrados, aunque quedará algún módulo libre que aún no vamos a ocupar.  

-Entiendo que la decisión tiene también cierto significado sentimental. 

-Eso nos ha empujado mucho. Económicamente, podíamos haber seguido en nuestro actual emplazamiento de la calle Charles Darwin, también el PTA, que tiene 6.500 metros, pero había también un componente sentimental con este edificio de López Peñalver, porque nos fuimos en una época de crisis para nosotros, en 2005, vendiendo la nave porque necesitábamos financiación. Lo que hacemos ahora al regresar es incrementar espacio y ganar en eficiencia y productividad (en la nave actual estamos en tres plantas). Al nuevo edificio irán más de 550 trabajadores. Otros 150 que trabajan en nuestra área de negocio con Vodafone se van a quedar en otro espacio que tenemos también alquilado en Charles Darwin, en la antigua nave de Isofotón, que ahora es de los dueños de Primor. 

El edificio de Aristeas Park en el PTA que será dentro de unos meses la nueva sede de Anovo.

El edificio de Aristeas Park en el PTA que será dentro de unos meses la nueva sede de ANOVO. / Álex Zea

-¿Qué irá en el nuevo edificio? 

-Nos llevaremos todas las actividades excepto los servicios de Vodafone (Masorange, Hewlett-Packard, Nintendo, Cecotec, Philips, PC Componentes, Huawei, Honor…) También nos llevaremos una parte de almacenaje que hasta ahora teníamos externalizada y que ahora internalizaremos ya en este nuevo emplazamiento. Es una nave que cumple muy bien con nuestras características, es muy específica, porque tiene un área de producción y otra área de almacén. Nos va genial para nuestra actividad es tanto de laboratorio, producción industrial y de logística. Se han instalado placas fotovoltaicas para hacer que la nave esté muy cerca de ser autosuficiente energéticamente. La gran inversión la hizo la propia Aristeas y nosotros estamos haciendo otra inversión de 2,5 millones de euros para adaptarla a nuestras necesidades. Hemos firmado un compromiso inicial de estancia por diez años.

-¿En qué fecha planean que puede producirse la mudanza? 

-Es muy difícil precisar; pero empezaremos poco a poco este mismo agosto. En otoño, por octubre o noviembre, tiene que estar todo cambiado. Queremos que sea algo emblemático. Ese edificio fue inaugurado por el rey Juan Carlos en 1995, cuando Alcatel se trasladó al PTA.

-Anovo tiene el objetivo de alcanzar los 100 millones de euros de facturación.

-Sí, ya estamos cerca. Nos hemos metido en un negocio de logística directa con un tema de financiación de dispositivos electrónicos y de tecnología. La facturación ha crecido por ello, aunque el porcentaje de beneficio ha disminuido. Este año llegaremos a los 93 millones, muy cerca ya de la centena. En 2002 partíamos de 80 millones así que las cifras están aumentando.

-¿Qué retos tiene por delante en estos próximos años?

-Diversificar más el rango de productos para reparar. Estamos intentando meternos en robótica, en electromedicina y en video-walls (pantallas gigantes). Hemos realizado una adquisición de una empresa para instalaciones y reparaciones de video-walls, porque cada vez hay y habrá más. También queremos hacer alguna operación de salir fuera de España. Hay nuevos clientes como Cecotec que nos están empujando a acompañarles a algunos países como Italia o Alemania. Creo que vamos a empezar por Italia, haciendo reparaciones de producto allí, quizá en 2025..

-¿Cómo ve la evolución de la Málaga tecnológica?, ¿cuál cree que ha sido la clave del éxito?

-Creo que la Universidad de Málaga ha jugado un papel muy importante atrayendo estudiantes de talento, también internacionales. Y luego está el empuje de la administración. Veo a un Ayuntamiento muy activo, cercano, empujando a que ocurran este tipo de cosas. Y, por supuesto, la dirección del PTA. El triángulo PTA-Universidad-Administración está funcionando. Quizá también se ha aprovechado el parón que ha podido tener Barcelona. Málaga estaba preparada para la ocasión. Y cuando llegan a un territorio varias multinacionales se produce un efecto llamada para el resto. Fíjese en el ejemplo de Google, cuyo anuncio de que venía a Málaga provocó también la llegada de Capgemini ciberseguridad.

MLG 25-06-2024.-José García, CEO de ANOVO.

José García, de ANOVO, en la entrevista con La Opinión de Málaga. / Alex Zea

-¿Echa de menos que haya más negocios en Málaga vinculados al ámbito industrial? 

-Es cierto que yo veo toda la parte más tecnológica muy orientada a la parte de software. Pero la parte industrial y el hardware, es también muy importante. El cloud tiene un soporte físico de ordenadores que las grandes compañías están instalando en zonas que no tienen por qué ser las grandes ciudades sino en zonas más rurales. Sería estupendo que estuviesen también en la provincia de Málaga. Nos ofrecemos, por supuesto, a dar apoyo a estas empresas, grandes y no tan grandes, para ayudar a mantener esa estructura. De hecho, otra de las divisiones de Anovo es la reparación de infraestructura de red de móviles (antenas o núcleos de comunicaciones en las ciudades) y de componentes electrónicos de instalaciones fotovoltaicas.

-¿Qué tiene que hacer Málaga para digerir bien su éxito? No hay profesionales suficientes para toda la demanda tecnológica, los precios de la vivienda están disparados, faltan infraestructuras de movilidad.... 

-Málaga no va a morir de éxito. Lo está haciendo bien. Lo que pasa es que son cosas muy lentas. Una empresa puede decidir venir a Málaga y decir que necesita 500 ingenieros, pero tampoco puede tener a esos profesionales al momento. Estén llegando más escuelas de formación para ayudar en la generación de talento. Hay que abrir también un poco el foco hacia la provincia, ampliar infraestructuras, fomentar el transporte público de calidad, para que llegue hasta el PTA. No puede ser que al Parque solo se pueda ir coche. Y lo del tema de la vivienda, el precio del alquiler... es algo que urge resolver.

Suscríbete para seguir leyendo