Una clínica de Málaga es la primera de España que puede clonar a tu perro o gato

En 1996, la clonación de la oveja Dolly se convirtió en un hito científico y abrió la puerta a un mundo nuevo, el de la ingeniería genética. A partir de ahí, la clonación de animales se ha popularizado, convirtiéndose en un negocio en auge en países como Estados Unidos, China o Corea del Sur. 

El último en hacer uso de esta réplica genética fue el presidente argentino, Javier Milei, que clonó a su perro Conan, ya fallecido, y ahora tiene cuatro mastines prácticamente idénticos a él. 

Ahora, la clonación de animales también se puede realizar en Málaga, en el primer y único laboratorio de España. Por unos 55.000 euros la clínica Ovoclone de Marbella puede crear una copia genética de tu perro. 

Cómo se hace

Enrique Criado, fundador y director ejecutivo de los centros de reproducción asistida Grupo OVO, del que forman parte Ovohorse (la división especializada en clonación equina) y Ovoclone (la de mascotas) explica en qué consiste está clonación: "Cogemos un trozo de piel del animal, del tamaño de un granito de arroz, y de ahí obtenemos la muestra de ADN. Esto se puede hacer cuando está vivo o inmediatamente después de su muerte". 

Después se genera una serie de células que se llaman fibroblastos y que tienen un núcleo con la información genética. Ese núcleo se extrae y se inyecta en un óvulo de la misma especie que se ha enucleado (extraer el núcleo) previamente para desarrollar un embrión.

Se desarrolla así un embrión que tiene el 99,9 % del material genético del animal original y que se implanta en una hembra para que lo geste.

Crear un gemelo genético no implica, sin embargo, que dos animales vayan a ser exactamente iguales, ni en comportamiento ni en apariencia física, ya que la mascota resultante tendrá una pequeña parte del genoma de la hembra que aporta el óvulo: es el ADN mitocondrial, que representa ese 0,1 % restante de la genética del nuevo ser.

Otros famosos como la actriz Barbra Streisand o la diseñadora Diane von Fürstenberg han clonado a sus mascotas.

Esta clínica es la única del país que clona, además de perros y gatos, caballos, camellos o vacas. La alta demanda por la clonación de caballos reside en una motivación económica: "Hay caballos que cuestan mucho dinero y el fin es mantener que sean de pura raza", afirma Criado.

Si clonar un equino, que cuesta unos 75.000 euros, tiene un sentido económico, en el caso de los perros y gatos prima lo emocional: “La gran mayoría de los que nos llaman son gente muy normal. Nos llama mucha gente muy interesada y encantada de poder hacerlo”, recalca el CEO. 

Aumento de la demanda

Clonar un perro cuesta actualmente unos 55.000 euros en España, y hacerlo con un gato, unos 50.000. Dado que es un proceso costoso, la clínica marbellí ofrece otra opción "más asequible": la congelación de la línea celular del animal, que tiene un coste de unos 3.000 euros y que consiste en la criopreservación de su genética durante un tiempo ilimitado.

"Mucha gente cree que es experimental, pero no es así. Esto ya es algo que se puede hacer y que ya hacemos aquí en Málaga", afirma el CEO de Ovoclone

De esta manera, el dueño de una mascota tiene la posibilidad de clonarla en un futuro: “Antes clonar costaba 100.000 euros, pero ahora cuesta la mitad. En el futuro la previsión de precios es que bajen, por lo que si guardas la línea genética en la próxima década será más barato”, sostiene el embriólogo. 

Y añade: “Mucha gente cree que es experimental, pero no es así. Esto ya se hace en Estados Unidos, en China o en México, es algo que se puede hacer y que ya hacemos aquí en Málaga”.

Parecidos, pero no iguales

La catedrática de Genética de la Universidad de Barcelona (UB) Gemma Marfany asegura que el problema aquí es "la expectativa" que tiene la persona que decide clonar a su mascota, ya que "puede pensar que volverá a tener a su perro o gato, pero eso no es así, tendrá otro perro u otro gato".

Marfany, que es miembro del Observatorio de Bioética y Derecho de la UB, remarca que el nuevo animal muy probablemente se parecerá mucho al original, pero tendrá su propio carácter. Incluso es posible que si el fallecido tenía una manchita en la frente, el nuevo la tenga en otro lugar.

"¿Verdad que a nadie se le ocurre que cuando se muere un hijo clonas a otro y lo tratas igual pensando que es el primero? No, es uno nuevo, una nueva persona, tiene entidad propia. Pues pasa lo mismo con las mascotas", subraya a EFE Marfany.