Ecologistas

Greenpeace se suma a la manifestación en Málaga por la dificultad de acceso a la vivienda

El colectivo ha animado a la participación en esta marcha el sábado para reclamar un cambio en el modelo de turismo por su impacto ambiental, social y urbanístico

Cartel anunciador de la movilización de este 29 de junio

Cartel anunciador de la movilización de este 29 de junio / Miguel Ferrary

EFE

La organización ecologista Greenpeace ha anunciado este martes que se suma a la movilización convocada este sábado 29 de junio  en la capital malagueña por el Sindicato de Inquilinos con el lema 'Málaga para vivir, no para sobrevivir' para alertar sobre las dificultades de acceso a la vivienda y contra la 'turistificación'.

El colectivo ha animado a la participación en esta marcha para reclamar un cambio en el modelo de turismo por su impacto ambiental, social y urbanístico.

Los beneficios procedentes de este sector son "la excusa perfecta para permitir el deterioro de la naturaleza y la turistificación de las ciudades y costas de todo el país", ha sostenido.

Entre las consecuencias de esta 'turistificación', ha mencionado la disminución de viviendas disponibles para el alquiler de larga duración, la pérdida de población en centros históricos y en poblaciones costeras o pueblos dentro de espacios naturales protegidos, la pérdida de identidad de las ciudades o el deterioro de los espacios naturales.

Fruto de ello, ha indicado que "empiezan a surgir movilizaciones por todo el país que claman por un cambio de modelo turístico", como la convocada en Málaga este sábado, que apoyan medio centenar de colectivos.

Denuncia el "derroche de agua" para el turismo

En cuanto al consumo de agua, ha señalado que mientras el de una persona residente en España es de 127 litros al día (directo e indirecto asociado a productos y servicios), el de un turista oscila entre 450 y 800 litros al día, al sumarse el derivado de instalaciones como piscinas, saunas, riego de zonas verdes, lavanderías o climatización.

El consumo de agua de una persona residente es de 127 litros al día y el de un turista oscila entre 450 y 800 litros

La provincia de Málaga, con 14 millones de visitantes en 2023, presenta "la costa más transformada del estado español", con un modelo de urbanización "dispersa y con presencia de piscinas y proyectos como el de Alcazaba Lagoon que requieren, urgentemente, un cambio de rumbo", ha reclamado.

Greenpeace se ha trasladado este martes hasta Alcazaba Lagoon, una laguna de agua artificial de 1,4 hectáreas de extensión situada en la localidad malagueña de Casares, para denunciar el "derroche de agua" y el "sinsentido" de instalaciones como esta, construida en "una zona crítica en términos de agua".

Esta instalación, que según la organización es "la mayor laguna artificial de Europa", requiere unos 28.000 metros cúbicos para su llenado, "el equivalente al consumo medio diario de unas 215.000 personas".

Ha recordado que el agua embalsada en las Cuencas Mediterráneas Andaluzas es de 360 hectómetros cúbicos (el 30 % de su capacidad), lo que supone 30 hectómetros cúbicos menos que el año anterior y una cifra muy por debajo de la media del agua embalsada en los últimos diez años.

A pesar de las lluvias que cayeron en primavera, "la situación de la provincia de Málaga es crítica" y se mantienen restricciones en la Costa del Sol Occidental "como la bajada de presión entre las doce de la noche y las seis de la mañana todos los días de la semana, excepto los sábados; o el uso del agua únicamente en playas para personas con diversidad funcional".

Estas medidas "contrastan con la política de la Junta", que "ha permitido" el llenado de piscinas privadas, ha lamentado Greenpeace, que ha criticado el "agravio comparativo" hacia el sector agrario.

Una actividad que devora el territorio

"Greenpeace demanda cambios estructurales que impidan que esta actividad siga devorando el territorio, las ciudades y a las personas. Necesitamos transitar del modelo actual, que genera dependencia en un sector económico, incrementa las desigualdades, y acrecienta la escasez y la degradación de los recursos naturales, a un modelo que fortalezca la resiliencia comunitaria y del territorio de forma justa, que contribuya a la regeneración de ecosistemas, la reducción del uso de recursos y la distribución equitativa de los beneficios sociales y económicos", explica Berraquero.

"Fruto de los impactos que esta actividad está generando, empiezan a surgir movilizaciones por todo el país que claman por un cambio de modelo turístico", asegura. En el caso de Málaga, un movimiento ciudadano reclama un cambio en el modelo turístico y "Greenpeace se suma a la movilización convocada este próximo sábado, 29 de junio, a las 11.30 horas en la plaza de la Merced de la ciudad".