Quinto título europeo para Adrián Miramón en Polonia

El malagueño Adrián Miramón ha logrado culminar este fin de semana una competición casi impecable hasta adjudicarse su quinto título en el Campeonato de Europa de Remo de Mar. En las aguas polacas de Gdansk, su concurso empezó con autoridad, al lograr el sábado el mejor tiempo. Y este domingo logró superar con solvencia a diferentes rivales en los cruces. 

El remero malagueño sigue haciendo historia en su deporte y ya apunta a su próximo objetivo, el Mundial de Génova en septiembre. Con una facilidad pasmosa, que no es más que el fruto de una preparación específica en la modalidad Beach Sprint, y de un gen competitivo innato, Miramón se ha vuelto a imponer en una especialidad que será olímpica en los JJOO de Los Ángeles 2028. 

Es el quinto título europeo del remero del Club Raspas del Embarcadero, que ha cuajado una actuación perfecta de principio a fin en el muelle de Brzezno. El mal estado del mar Báltico, con un elevado oleaje, hizo que Miramón se sintiera como pez en el agua y dominara las diferentes regatas desde casi el sprint inicial en la arena. 

En la final se deshizo del portugués Gonçalo Delgado con un tiempo de 2:46,15. Obtuvo una renta de nueve segundos, más que considerable en una prueba tan rápida y explosiva. La competición arrancaba el sábado con el time trial, en el que Adrián Miramón lograba el mejor tiempo (2:43,05), seguido por el propio Delgado. 

Esta marca permitía a Miramón tener los mejores cruces en las eliminatorias del domingo. Así, el malagueño con un gran dominio de las olas, de la técnica y de los tiempos de las regatas, eliminó al sueco Dennis Gustavsson en octavos; al polaco y anfitrión Adam Bujnowski en cuartos; al lituano y otro de los favoritos Zygimantas Galisanskis, en unas duras semifinales (2:39;35); y al portugués Gonçalo Delgado en la gran final. 

Su celebración en la llegada a meta desataba la tensión contenida, después de superar en las últimas dos semanas diversos problemas físicos, entre ellos una herida en la espinilla que precisó de puntos de sutura y que le obligaron a competir con un apósito en la pierna.

El deportista malagueño argumentó algunos aspectos sobre este camino hasta Polonia: "Ha sido un año complicado, porque también estuve algún tiempo parado por una lesión de rodilla, así que estoy muy contento porque me están saliendo las cosas. He entrenado mucho y muy duro. Sabía que si competía con normalidad lo iba a tener más sencillo porque estaba manejando altas velocidades en las concentraciones que hemos tenido con la selección".