Opinión | Tribuna

Un nuevo modelo de ciudad

Repasar los últimos 25 años de historia en Estepona es encontrar un antes y un después en el desarrollo de la ciudad a todos los niveles. En la última década, el municipio ha experimentado una revitalización económica decisiva gracias a una gestión que ha centrado sus políticas en la defensa de la sostenibilidad, la calidad de vida, y el equilibrio entre la innovación y las señas de identidad. Un nuevo modelo de ciudad gracias al cual se ha reactivado la actividad empresarial y turística, se han reducido los datos del paro, y se ha incrementado la población con cifras récord.

Han sido años de trabajo intenso para sanear unas cuentas municipales que encontramos en números rojos y con una deuda heredada de 300 millones de euros. El resultado de la gestión que en materia económica hemos venido haciendo, y que ha sido incluso referente para otros municipios, ha permitido tener un remanente de Tesorería récord a día de hoy mientras que se ha ido haciendo frente a esa deuda de la que ya se ha pagado más del 90%.

La transformación de Estepona en estos últimos 13 años ha sido rápida pero segura y ha comenzado a dar sus frutos. El modelo sostenible de ciudad ha logrado reposicionar la marca turística Estepona y vincularla a un destino de calidad y a segmentos como el turismo urbano, consiguiendo romper con ello la estacionalidad y ofertando un destino interesante durante todo el año para el turista. La apuesta municipal por una ciudad atractiva y por iniciativas como el proyecto ‘Estepona, Jardín de la Costa del Sol’ o ‘la ciudad del millón de flores’, con los que se han revitalizado un total de 130 calles, han desestacionalizado el sector y ha traído consigo la creación de establecimientos hoteleros de calidad, siendo casi una veintena de establecimientos boutiques los que han abierto sus puertas en el casco urbano en la última década atraídos por el nuevo diseño del entorno. Esta tipología de establecimiento, que no existía en la localidad hasta el inicio de este proyecto municipal, ha propiciado la dinamización del tejido económico y de restauración del centro de la ciudad. A esto hay que añadir la puesta en marcha de otras infraestructuras tan singulares como el corredor litoral, o la seguridad jurídica y el rigor institucional que se ofrecen a los inversores.

Es importante señalar las sinergias que ha creado este proyecto de desarrollo urbano sostenible y de apuesta por la calidad de vida, el impacto económico y social que ha implicado por el evidente impulso a la actividad económica de la ciudad y la generación de empleo y riqueza. Las cifras de apertura de nuevos negocios avalan esta tendencia. También las cifras del paro. El número de desempleados registrados ha pasado de los 7.983 que había en enero del año 2012 a los 4.137 contabilizados en este pasado mes de abril.

Y ello, además, en un escenario de un importante incremento de la población censada que ha experimentado la ciudad, pasando de los 65.667 empadronados en 2011 a los más de 82.000 registrados actualmente en el Padrón Municipal. Estepona ha sido durante el pasado año el municipio andaluz con mayor crecimiento de población, lo que da idea de su dinamismo. En el padrón figuran hasta 135 nacionalidades diferentes.

Proyectos como el Centro Cultural Mirador del Carmen (que incluye una sala expositiva, un auditorio y en breve el nuevo conservatorio de la ciudad y una biblioteca de siete plantas) y otras iniciativas que apuestan de forma deliberada por la cultura como el Auditorio Felipe VI, la Ruta de Murales Artísticos o la Ruta de la Poesía, son prueba de la importancia que las artes y la creación están teniendo en la nueva Estepona.

Por otra parte, la prolongación del corredor litoral (que conecta ya 23 kilómetros de paseo marítimo), una red de aparcamientos públicos con coste de 1 euro al día para el ciudadano (gestionado por personas con diversidad funcional), la peatonalización de buena parte del casco antiguo, o la creación del gran bulevar peatonal en el que se ha transformado parte de la antigua carretera N-340 (que ha conectado el núcleo urbano con el mar y ha dado como resultado uno de los mayores paseos marítimos de España) son sólo algunos de los otros hitos que ha vivido Estepona en la última década y que han contribuido de manera decisiva a la reactivación económica de una ciudad que ha seguido un modelo basado en la sostenibilidad y la calidad de vida de sus ciudadanos.

Como alcalde de Estepona felicito a La Opinión de Málaga por este cuarto de siglo de historia dedicado a ser testigos de cuanto ha acontecido en toda nuestra provincia. Os deseo que los próximos años sean de impulso, prosperidad y buenas noticias para todos.