La bajada de la gasolina supone en pleno julio un alivio para las familias

La bajada de los carburantes a las puertas de la temporada alta ha representado un importante alivio para los bolsillos de las familias. Justo en el periodo con un mayor número de desplazamientos por vacaciones, la gasolina se abarató en un 2,5% y el gasóleo casi en un 2%. No obstante, las asociaciones de consumidores vuelven a recordar que casi la mitad de las cantidades que se abonan por estos productos corresponden a distintos impuestos.

En el arranque de esta semana, el precio medio de la gasolina se encuentra por encima de los 1,66 euros por litro en la provincia de Málaga, frente a los 1,53 euros que marca el gasóleo. Pero hay diferencias de hasta 0,3 euros en función de las estaciones de servicio que encontremos en nuestra ruta.

El portal oficial del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico arroja para el inicio de esta semana un coste mínimo, en el caso de la gasolina, de 1,472 euros. Hay que desplazarse a la gasolina de la avenida de Juan XXIII de Cuevas de San Marcos, muy cerca de la provincia de Córdoba, para poder repostar a ese precio. Le siguen los 1,489 euros de la estación que en la carretera A-7203 encontramos en Villanueva del Trabuco.

Le siguen las gasolineras de la MA-407, en Arroyo de la Miel, con este combustible a 1,498 euros; la Plenoil de Cerralba, a 1,507 euros, o la Plenoil de Torremolinos, con el litro a 1,517 euros.

Para el gasóleo, la estación de Agla en Casarabonela lidera el listado con el litro a 1,316 euros. Le sigue la gasolinera de esta misma cadena que se localiza en Pizarra, al ofrecerlo a 1,317 euros.

En la gasolinera del Centro Comercial El Ingenio, en el término municipal de Vélez-Málaga, el grupo Eroski también ofrece este carburante a 1,317 euros. Y le siguen otras dos gasolineras de Cerralba, en las inmediaciones de Pizarra y Álora, a idéntico importe por litro repostado. Cabe recordar que en junio no sólo han bajado gasolinas y gasóleos. También amortiguó su tasa interanual, hasta el 4,2%, el capítulo de alimentos y bebidas no alcohólicas. Fue a raíz de la bajada de los precios de aceites y grasas.

Para los turistas, no obstante, en lo que va de año han subido capítulos como el de la electricidad, con un 18% acumulado y un 3,5% sólo para el mes pasado. Y el capítulo de la hostelería ha generado un incremento igualmente del 5% si tomamos como referencia los importes de hace justo un año.

Lo que se destina a impuestos

Los colectivos que representan al consumidor reconocen que España no es de los países europeos donde el coste de los combustibles esté en un nivel más alto. Sin embargo, con los recuentos anuales suelen incidir que en nuestro país se destinan a impuestos 47 de cada 100 euros gastados.

De esos 47 euros, más de la mitad, concretamente 26 euros, terminan en la recaudación de las distintas comunidades autónomas. Y también reciben las entidades locales otros porcentajes. El Gobierno central gestiona finalmente 19 de cada 100 euros gastados en llenar los depósitos. Para el pago del combustible en el mercado mayorista se reserva el 38% del total, mientras que a distribución y márgenes para las gasolineras, el 15% restante.