La prevención de la conducta suicida en Málaga consigue reducir el número de intentos

La prevención de la conducta suicida en Málaga consigue reducir el número de casos. El Programa Cicerón, un proyecto pionero en Andalucía para la prevención, intervención y posvención del suicidio, ha beneficiado ya a más de medio millar de usuarios en Málaga, así como a su entorno familiar y social. El Hospital Virgen de la Victoria y el Hospital Costa del Sol cumplen así cinco años trabajando de forma conjunta para prevenir la que es la primera causa de muerte no natural en el país.

Liderado por el especialista en Psicología Clínica, Miguel Guerrero, este programa nació en el año 2020 con el objetivo de desarrollar, a través de cinco líneas estratégicas, diferentes actividades preventivas, basadas en la evidencia científica e implicando de forma coordinada a los diferentes dispositivos sanitarios, medios de comunicación, movimiento asociativo y recursos socio-comunitarios de la zona.

Así, el proyecto Cicerón consiguió aunar esfuerzos tanto de la unidad de Salud Mental que abarcan el Hospital Clínico y el Hospital Costa del Sol como del servicio de Urgencias de este último y el Distrito de Atención Primaria Costa del Sol, así como los distintos dispositivos especializados en salud mental, al fin de generar un circuito asistencial fluido, ágil y accesible a las personas en riesgo de suicidio.

Detección del riesgo suicida

Para ello, se creó un procedimiento asistencial que permite en la actualidad una mejor detección de la ideación y riesgo suicida, garantizar la continuidad asistencial y ofertar una intervención psicológica accesible, intensiva y eficaz a sus usuarios.

«Desde este programa se desarrollan numerosas iniciativas, tanto en el ámbito sanitario como comunitario, para avanzar en sensibilización, concienciación, alfabetización y desestigmatización del suicidio, a través de la celebración de jornadas, talleres, entrevistas en medios de comunicación o divulgación responsable en redes sociales», explica Miguel Guerrero.

El perfil de las personas que atiende esta unidad es el de «personas con trastornos psiquiátricos y/o psicológicos, con historia de intentos previos, conducta suicida activa, supervivientes de suicidio y pacientes vulnerables, así como personas mayores aisladas o con enfermedades crónicas».

A nivel docente, además, el proyecto cuenta con «más de 600 horas acreditadas de formación y capacitación a personal sanitario de diferentes categorías profesionales y niveles asistenciales en detección, abordaje e intervención de conducta suicida, a través de plataformas formativas como IAVANTE -la línea de formación y evaluación de competencias profesionales de la Fundación Progreso y Salud, la Consejería de Salud y Consumo y el Servicio Andaluz de Salud-; la Escuela Andaluza de Salud Pública o el 061 Emergencias Andalucía».

Por su parte, también se han desarrollado tres estudios de investigación acerca del suicidio y su prevención, «que han generado dos publicaciones científicas en revistas de alto impacto y colaboraciones con otros grupos de investigación en esta materia», añade Guerrero. Además, los profesionales de este programa colaboran, asesoran y participan en diversos grupos de trabajo en materia de prevención del suicidio del Sistema Sanitario Público de Andalucía.

Pionero en Andalucía

La Unidad de Prevención e Intervención Intensiva en Conducta Suicida (UPII Cicerón), creada en 2020 y ubicada físicamente en el Hospital Costa del Sol de Marbella, atiende a personas en riesgo suicida, familiares y supervivientes, es decir, las personas que han perdido a un ser querido por esta causa.

Este recurso pionero en Andalucía tiene la misión de garantizar una atención psicológica especializada, accesible e intensiva durante la crisis suicida, lo que supone una medida preventiva para evitar intentos por suicidio y fallecimientos por esta causa.

De este modo, las personas afectadas y sus familiares son atendidas desde el inicio en estas instalaciones, consiguiendo unos indicadores de resultados prometedores y que han demostrado su efectividad reduciendo el número de intentos y reintentos de suicidio; evitando abandonos prematuros; generando una mayor adherencia terapéutica o disminuyendo de forma significativa la necesidad de hospitalización.

En el año 2020, la Universidad Internacional de Cataluña otorgó a la UPII Cicerón un ‘Premio Hestia’ a la excelencia socio-sanitaria. Del mismo modo, el pasado 2022 obtuvo el ‘IV premio Alfabetización en Salud’ de la Escuela Andaluza de Salud Pública de Granada, por el proyecto ‘Cuando el conocimiento salva vidas’.