El área de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Málaga, que dirige Teresa Porras, se ha visto obligada a dar marcha atrás y rectificar la convocatoria de subvenciones para el cuidado de zonas verdes e incluir en la misma a las asociaciones de vecinos que en principio habían quedado excluidas este año, por primera vez.

La junta de gobierno aprobó en principio en marzo pasado la convocatoria de subvenciones para «actividades y proyectos que implique a los ciudadanos en el cuidado de las zonas verdes». En la misma, con una dotación de 250.000 euros, solo se les permitía solicitar ayudas a las entidades urbanísticas de conservación y comunidades de vecinos, excluyendo a las asociaciones de vecinos que tradicionalmente habían participado activamente en estas ayudas.

Ahora, tres meses después, tras las protestas de varias asociaciones que habían participado en los años anteriores en estas proyectos de conservación, el Ayuntamiento ha decidido rectificar e incluir también a las asociaciones vecinales como entidades solicitantes de las ayudas.

Para que no haya perjuicio, el Ayuntamiento ha acordado abrir un nuevo plazo de presentación de solicitudes para las asociaciones de vecinos que tendrá un periodo de veinte días desde la fecha de publicación en el boletín de la provincia.

En el informe jurídico realizado para avalar esta rectificación se señala que «dado que entre los objetivos de la convocatoria está la colaboración con las citadas entidades en el cuidado de sus zonas verdes, nada impide que puedan beneficiarse de dichas subvenciones».

Las asociaciones de vecinos habían venido participando de estas ayudas en los años anteriores de manera muy activa, destacando la actividad de mantenimiento de sus jardines que han venido realizando asociaciones como Mangas Verdes o Alameda Alta.

Cuando en marzo el Ayuntamiento eliminó de la convocatoria a las asociaciones de vecinos, el grupo socialista arremetió con dureza contra este método impuesto por el equipo de gobierno «ya que con el dinero de todos los ciudadanos lo que se está fomentando es el negocio privado de manera encubierta, ya que la gran mayoría de estas entidades de conservación utilizan el dinero de la subvención para contratar a una empresa privada que es la que se encarga del mantenimiento de los jardines», según señaló la edil Begoña Medina.

Ahora, la misma concejala se congratulaba ayer de la rectificación del área de Parques y Jardines, que permite la participación «como siempre» de las asociaciones de vecinos, pero «hemos tenido que denunciar públicamente la discriminación para que el Ayuntamiento dé marcha atrás en este asunto».