Dani Díez ha tomado una decisión y, aunque aún no es oficial y no habrá anuncios públicos por su situación «especial», quiere jugar en el Unicaja. El alero madrileño de 22 años y 2,03 metros de altura está dispuesto a venir a Málaga y va a aceptar el contrato que el club de Los Guindos le puso sobre su mesa por dos temporadas más una tercera opcional.

Díez, que habló para este periódico el pasado miércoles y explicó que estaba «orgulloso» de que el Unicaja se haya fijado en él, ha dejado a un lado otras dos ofertas, de Laboral Kutxa y de Valencia Basket. Los dos clubes de la ACB también han pasado propuestas al elegido «Mejor Joven» de la Liga Endesa, pero el alero tiene ya decidido venirse a jugar a Málaga.

El Unicaja ha intensificado los contactos con el jugador esta última semana. El club le pasó una oferta en firme y por escrito hace ya tres semanas y no había tenido respuesta. En la entidad se temían que tanto Valencia como Baskonia conocieran el alcance de las cifras de ese contrato y por eso se ha presionado en las últimas horas para que Díez adoptase ya una decisión.

El propio jugador madrileño explicó en estas páginas que aparcaba una respuesta definitiva hasta la celebración del próximo draft de la NBA, que se sorteará el día 25 de junio en el Barclays Center de Brooklyn (Nueva York). Y es que el jugador estuvo en el campus para jóvenes de Treviso, donde se exhibió para una docena de scouters de diferentes franquicias, con muy buen resultado, por lo que espera poder salir en la segunda ronda del sorteo de novatos.

El Unicaja le sigue de cerca desde hace mucho tiempo. El club es consciente de que no puede competir con los «grandes» de la Liga Endesa y que ha de acertar con sus jóvenes apuestas antes de que exploten definitivamente. Las conversaciones con su agente, José Ortiz, comenzaron en serio en la Copa del Rey de Las Palmas, donde se sentaron las bases económicas de la operación.

A la conclusión de la Fase Regular de la Liga hubo algún tira y afloja, ya que las pretensiones del jugador, con su nombramiento como mejor joven, subieron. Pero las dos partes llegaron a un buen entendimiento en varias reuniones que se han celebrado en Málaga en las últimas semanas. La última se produjo en pleno play off entre Unicaja y FC Barcelona, ya que se vio al representante -también lo es de Joan Plaza o Carlos Suárez- en las proximidades del palco de autoridades del Martín Carpena.

Ahora el Unicaja ha tratado de finalizar por la vía rápida la negociación, ya que no quiere que ningún otro equipo le pueda birlar a su joven apuesta. Díez, salvo cambio muy radical u otra oferta estratosférica, vestirá de verde, desoyendo otras propuestas de equipos como Baskonia y Valencia.

El alero ha promediado en el Gipuzkoa Basket 12,6 puntos, 7 rebotes y 15,1 de valoración, aunque no le ha servido para que su equipo descendiera a la LEB Oro. A pesar de ello podría permanecer en la ACB por los sempiternos problemas de Burgos para ascender.

Dani Díez guarda una relación muy próxima con la ciudad. Mantiene amistades de su etapa en el Real Madrid, con los hermanos Miguel y Nacho Molina, con los que coincidió en la cantera blanca, y suele bajar a Málaga todos los veranos para pasar aquí unos días en la Costa del Sol.

Ahora el alero se encuentra en Madrid y, todo lo que suceda con el Unicaja hay que ponerlo en cuarentena. Díez acaba contrato con el Real Madrid, con el que cumple el próximo 30 de junio. Aunque el club merengue le ha comunicado que no cuenta con él no hay que descartar que lo pueda llevar al tanteo, puesto que la continuidad en el club de Sergio Rodríguez o Sergio Llull, con propuestas de la NBA, no está para nada asegurada, y necesitará cupos.

De reojo, además, Dani Díez mira sus opciones de acudir este verano con la selección nacional que dirige el exentrenador del Unicaja, Sergio Scariolo.